Añorando de Ramón María
Ahora marchita y en soledad, su mente jugaba con aromas vividos, evocando así recuerdos.Aquellos dulces susurros del primer amor, donde rodeada de embriagadoras flores se atrevió a vivir sus primeros besos, mordiscos intensos de vida.Hoy olvidada en el tiempo, siente el brotar cálido de bellas perlas acariciando su hermoso rostro, añorando triste la que fuera un día, su primera y bella primavera
Segundo Premio:
Minificción a dúo de Danik y GusDe tanto pensar en sí misma, decidió tragarse su egocentrismo. Y se comió su hinchadísimo y enrojecido ombligo.
El paso del tiempo conlleva crear a su vez un pasado y una historia, al menos una por cada criatura que vive en el planeta, germinado la mezcla de historias en otras nuevas que tarde o temprano también reclaman su espacio en el tiempo.
ResponderEliminarClaro reflejo de la sociedad actual.
Un abrazo.
hay que mirarse menos el ombligo.
ResponderEliminarbuen micro